Nace en Gáldar, en agosto de 1951. es enfermero de profesión, pero entre sus grandes hobbis, está la confección del Belén, por la que siente una verdadera pasión. Nos comenta, que en la época de navidad, cuando se entrega de lleno a la realización del nacimiento, pierde muchas veces la noción del tiempo.Pasan las horas, y el está tan ajeno a todo que cuando mira el reloj, no puede creer, que el tiempo ha pasado tan rápido
Desde muy joven, se siente atraído, por la belleza, y el atractivo del portal de Belén, que se realizaba por aquella época en la iglesia de Gáldar, donde se pasaba largo rato extasiado, mirando con asombro, tanta majestuosidad. Era un regalo para mi vista, nos comenta el belenista casi con emoción, comentando sus recuerdos de niñez. Cuando habla, se desborda con sus expresiones, mezclando, emociones, sentimientos, y vivencias personales, de tal manera que cuando se le pregunta se refleja en su rostro, y en sus expresiones, que vive y siente de una forma muy especial, todo lo que está diciendo
Comienza su andadura, como casi todos, utilizando como materiales de trabajo, entre otros el corcho de alcornoque, que comprábamos en la imprenta, envasados en bolsas de plástico, y lo utilizábamos para realizar las montañas, otras veces usamos el papel marrón, que pintábamos, y luego se arrugaba, según donde lo colocaras, también se utilizaba la piedra volcánica. Para el famoso rio, tomábamos el papel albal, que antes llamábamos de platina. La vegetación de entonces eran los helechos, que íbamos a buscar a los campos, al igual que el musgo, que recogíamos entre las humedades, luego observando a nuestro alrededor, elegíamos algunas ramas de árboles, que ya las imaginábamos plantadas en el belén .
Recuerdo que mi primer belén lo realicé, sobre una caja de coñac, algún tiempo mas tarde en una caja de tomate, luego un banco de carpintería, y por fin, tomé toda una habitación.
Todo sucedía así, hasta que un buen dia conocí a un compañero belenista, (Pedro Armas, y a su esposa Julia) y quedé admirado por su trabajo.
En mi opinión, creo que el es el más grande belenista que tiene Gran Canaria. Tuve la gran suerte de conocerle, y aprender mucho de el
De hecho, yo le considero mi maestro. Me hizo conocer el mundo de los congresos belenista, que cada año se celebran en la península, donde conoces mucha gente, hablas y aprendes mucho de los demás, conoces trucos, maneras diferentes, de hacer la elaboración del belén, y lógicamente, te enriqueces como persona, por consiguiente, a este compañero Pedro, le debo casi todo lo que he aprendido, y aunque, luego tengas tu propio estilo, quien conoce a Pedro, se ve en mi belén la influencia de este amigo.
A partir de ahí, te creas a ti mismo, y das rienda suelta, a todo lo aprendido. Cada año siempre lo hice en casa, y la gente, los colegios venian a verlo, hasta que el ayuntamiento, me llama para realizar un belén, en sus instalaciones, y así durante cinco años.Mi primer trabajo fuera de casa, que fue precisamente el municipal, fue allá por el año 97 – 98 . Fue una experiencia bonita, porque me rodearon unos compañeros magníficos, y con muchas ganas de colaborar. No cabe duda, que sentí un gran respeto, pues era la primera vez que trabajaba, para el público, y sentía el temor, de no estar a la altura que se esperaba de mí. El dia que se abrió al publico, parece que tuvo bastante aceptación y entonces ya me relajé un poco y me sentí mejor.
En la actualidad, llevo dos años, realizando el belén en el juzgado de Guía, y al mismo tiempo otro también en los Quintanas.
Este año, y a última hora, surgió un compromiso con un compañero, y realizamos otro pequeño, en Barranco Hondo.
El material empleado, es el corcho blanco, para la realización de la viviendas, murallas etc. Escayola, para realizar las montañas, las cuales ya tienen como base, tela metálica, ó de gallinero, sobre las que ponemos, sacos de papas, cortados, y empapados en escayola.
Las hojas de las palmeras, están hechas con cartulina, que luego se pintan. El tronco de la misma, es una rama de un árbol, revestida con arcilla, que luego trabajas poco a poco.
Tenemos los cestos, del mercadillo hechos, con hilo carreto, y las frutas, son de porcelana rusa, al igual que alguna planta artificial, que podemos encontrar, como son las piteras, hiedras etc.
En general toda la vegetación es natural, que tú vas eligiendo, cuando sales al campo